El Elíseo (París/Francia) extendió este viernes 10 de octubre 2014 su alfombra roja para recibir a un invitado poco habitual. Por sus escaleras no desfiló esta vez ningún primer ministro, sino Arnold Schwarzenegger. Tal como os informé en su momento, hace unos meses que el presidente galo, François Hollande, invitó a Arnold Schwarzenegger a París para hablar sobre el cambio climático y preparar la cumbre que se celebrará en la capital en 2015. Arnold es fundador y vicepresidente del llamado R20, una ONG que reúne a unas 500 regiones movilizadas por la defensa del medio ambiente, entre ellas París. Por eso, para Hollande era importante intercambiar impresiones con "una personalidad mundialmente conocida y comprometida con la preservación del clima", según destacó tras la cita. Durante una hora el presidente galo y el ex gobernador de California hablaron de los retos y desafíos de los países a la hora de luchar contra el cambio climático. Aunque el debate para la prensa en las escaleras del Elíseo no era tanto la ecología sino la oportunidad de una foto entre el actor, que fue míster universo y mide casi un metro y noventa centímetros, y un François Hollande de esencia pequeña cuya imagen y popularidad, además, está muy desgastada por culpa de la crisis económica. "Es un doble corte: por un lado, una estrella, en palacio, que brilla; por otro, hay riesgo de frivolidad", señalaba un dirigente socialista al diario 'Le Parisien'. Inoportuno para algunos, según un consejero ministerial, "una sesión de fotos con la estrella americana no puede hacerle daño a Hollande". La diferencia de altura no importó a un Nicolas Sarkozy sin complejos que en 2007 se fotografió junto a Arnold. Tampoco esta vez para Hollande, que posó también sin problemas al lado de Arnold. Por otro lado, Nicolas Hulot, consejero del presidente y embajador especial para la protección del planeta, fue el que convenció a Hollande de que debía recibir a Schwarzenegger para que le aconsejara de cara a la cumbre que se celebrará en París en noviembre de 2015 y en la que participarán 195 países. Francia apuesta por un acuerdo para reducir las emisiones de gas y quiere lograr un consenso con el resto de participantes. Quiere "promover una agenda de soluciones que muestre la compatibilidad entre el desarrollo económico y social y la lucha contra el cambio climático", según declaró el presidente.
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